¿Vives o sobrevives? Nuestro cerebro se mueve por repetición, una manera de querer controlarlo todo es a través de la rutina, de allí que a veces nos sintamos estancad@s, o aburrid@s, sin propósito pero a la vez sintiendo que tenemos el control de lo que pasará.. Intencionar nuestra vida es utilizar la fuerza universal alrededor de nosotr@s, ponerle una afirmación o cargarla de información que nos recuerde para qué estamos aquí y por qué vale la pena despertar todos los días, dejándonos sorprender por la manera en la que eso se creará.
Imagínate que todos los días te levantas, desayunas, vas al trabajo, regresas, platicas con una amiga, comes, haces ejercicio, checas tus redes sociales, duermes y al siguiente día sucede lo mismo, a veces se siente que esto es un ciclo sin fin, a veces, eso puede desmotivarnos, sin embargo, curiosamente en una rutina así, los cambios nos dan miedo, porque no los prevenimos.
¿Qué pasaría entonces si intencionamos estas actividades o las cosas que utilizamos en nuestra vida? Y que a cada cosa que hagamos le pongamos un propósito, una afirmación que nos recuerde lo que queremos mientras vivimos el proceso.
Aplicar la intención es enfocar nuestro pensamiento para realizar una acción determinada con ayuda y conexión de la Energía Universal, esta fuerza omnipotente que nos jala hacia donde nos expandimos. Entonces, imagínate lo gozosa que se vuelve la vida cuando vivimos con intención, cuando recordamos que estamos conectad@s, que lo que somos y hacemos tiene un propósito que nos recuerda el sentido de nuestra vida.
Usar la intención, no es tan difícil, pero requiere que creamos en lo que decimos y que nos abramos a la creatividad, puedes intencionar desde el ejercicio que haces con afirmaciones, las bebidas que bebes agradeciendo por ellas, o incluso hasta tus objetos personales con una palabra poderosa. Aquí en HELLO ZEN tenemos una “Guía para intencionar todo en tu vida” que más adelante te podrá servir.
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